Para comer a cualquier
hora del día, ya sea para desayunar, almorzar, comer o cenar.
Ideal para el brunch, termino británico usado para
nombrar un desayuno tardío o el almuerzo, pero que actualmente su horario ha
variado oscilando entre media mañana y media tarde.
El actual brunch no tiene un término específico en
la lengua española, pero, inconscientemente adoptamos este hábito ese día
festivo que uno se levanta a las mil y no
sabe si desayunar, almorzar, comer….o volverse a acostar, sobre todo después de
trasnochar, cuando lo que te pide al cuerpo son mezclas raras como un café
cargado con algo que tenga alimento *.
(*)Tener alimento, expresión usada por mi
abuelo para referirse a comidas con alto contenido en grasas).
Ingredientes:
Rebanadas de PAN (de molde o como en este caso, de
semillas y cereales).
HUEVOS (uno por rebanada).
ACEITE DE OLIVA (adaptación mediterránea ya que originalmente
se hace con mantequilla, de todas maneras si tenéis la posibilidad probad usad MANTECA DE VACA…..el sabor alcanza otro nivel).
SAL
y PIMIENTA
Cascar un huevo y
verter la mayor parte de la clara en un plato. Reservar el resto de clara y la
yema.
Colocar la rebanada
en el plato con la clara, dejar que el pan se empape en esta durante 1 minuto
por cada lado.
Realizar al pan un agujero en el centro con ayuda de un corta
pasta circular o a falta de este un vaso de chupito (vaso para licor) puede
servir.
Se calienta a fuego
medio una sartén antiadherente, cuando
esté caliente añadir un poquito de aceite (o manteca).
Poner la rebanada de pan en la sartén e
inmediatamente después verter la yema con el poquito de clara reservada en el
agujero.
Tostar durante 1
minuto y con ayuda de una espátula (y con cuidado de no romper la yema) dar la
vuelta a la rebanada y tostar por el otro lado otro minuto más.
Retirar de la sartén
y salpimentar.
Nota: La tapita con
la clara también se tuesta por ambos lados salpimentado posteriormente.